Algunas personas demeritan los logros de Messi con la excusa de que es un "jugador de sistema", ya que ha jugado en el Barcelona durante toda su carrera. Como demostraré en esta entrada, esto es completamente falso, así que sin más preámbulos, entremos en materia.
En La Masía no era un jugador de sistema, ya que podía jugar tanto en la banda izquierda como de número 10, lo que demuestra que no era un jugador de sistema en sus inicios en La Masía, ya que ni siquiera se le asignaba un rol fijo. Cuando debutó, quedó aún más claro, ya que Rijkaard cambió por completo su papel de número 10/extremo izquierdo a extremo derecho. Se adaptó muy bien a ello, y más tarde se convirtió en titular en la temporada 2006/07 y en la 2007/08.
Volvió a cambiar de rol con la llegada de Guardiola, cuando cerca del final de la temporada 2008/09 puso a Messi como falso 9, un papel completamente nuevo al que solía jugar (un extremo derecho). Jugó en el centro en vez de en la banda derecha y causó estragos con los problemas tácticos que causó a otros equipos debido a su nueva posición. Se mantuvo relativamente igual con Vilanova y Martino en las temporadas 2012/13 y 2013/14 respectivamente.
Todo cambió de nuevo cuando llegó Luis Enrique en la temporada 2014/15, y con la introducción de Suárez, formando el trío de la MSN, se desplazó a la banda derecha para dejar que Suárez ocupara el papel de central, pero también jugó algo como falso 9, utilizando a Suárez como referencia. Allí, en el centro, podía dictar el juego del Barça, y a juzgar por sus mapas de calor, Messi empezó a ser mucho más central (en comparación con su banda derecha) a finales de 2016 y principios de 2017.
Tras la marcha de Luis Enrique, Valverde volvió a cambiar el sistema de Messi. Ahora, el equipo dependía mucho de él, al igual que en la temporada 2012/13. Su papel volvió a ser el básico, en lugar de un delantero de banda que iba al centro, le hizo jugar principalmente en el centro. También empezó a jugar más hacia atrás, jugando más en profundidad también.
No ha tenido mucho tiempo para evolucionar desde que llegaron Setién y Koeman, pero ha mantenido su papel de central en el campo, con algunas intervenciones en el centro derecha y cayendo también en profundidad para recoger el balón.
Messi ha prosperado en todos estos sistemas, lo que demuestra que no es un jugador de sistema en absoluto. De hecho, se podría argumentar que Messi ES el sistema, ya que algunos entrenadores quieren centrarse principalmente en él para que su táctica funcione (Messidependencia).
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